¿Va a dar sus primeros pasos en una profesión, o cambiar la que desempeña actualmente? Probablemente, en ese tránsito que proyecta hay una profesión que no le ha pasado por la mente: los seguros.
“Usualmente, cuando planificamos nuestra profesión o consideramos un empleo totalmente diferente, no pensamos en la industria de los seguros”, explica Charles Valinotti, Director de Seguros y Productos de la aseguradora QBE. “En realidad, la mayoría de los que trabajan en el campo de los seguros le dirán que se incorporaron a la misma por casualidad”.
Según el informe de clasificación de profesiones CareerCast’s 2013 Jobs Rated Report, la profesión de los seguros puede ser una excelente opción. En una selección de 200 empleos, el de actuario ocupó el primer lugar. Los actuarios trabajan en compañías de seguros y otros negocios que controlan riesgos financieros, usando estadísticas y estudiando acontecimientos futuros inciertos – como accidentes y pérdidas de propiedad a causa de catástrofes naturales –para determinar las primas de seguros y las reservas para el pago de reclamaciones.
Otros dos empleos en el campo de los seguros también formaron parte de los 100 mejores: el de asegurador ocupó la 74ta posición, mientras que el de agente de seguros fue ubicado en la 78va.
La clasificación de profesiones de CareerCast analizó factores como ingresos y potencial de incremento de ingresos, perspectivas de contratación y exigencias físicas.
Los empleos de actuarios, aseguradores y agentes no son los únicos disponibles para quienes estén explorando oportunidades. “Seleccionamos personas magníficas y les ofrecemos profesiones inmejorables”, afirma Valinotti. “Además de proporcionarles capacitación y oportunidades de desarrollo profesional, ayudamos a abrir puertas y probar el potencial de las personas. Ninguna industria puede hacerlo tan bien como la nuestra”.
Las aseguradoras analizan las posibilidades existentes en todos los candidatos a empleos, independientemente de su nivel de instrucción, especialización universitaria o experiencia, explica Valinotti.
“Buscamos personas inteligentes que demuestren lo que pueden aprender”, continúa Valinotti. “Los que sean elocuentes, adaptables y buenos comunicadores, logran el éxito en el campo de los seguros”.
Durante años, el campo de los seguros ha combatido el concepto de que sus empleos se enfocan solamente en ventas y reclamaciones. Valinotti asegura lo contrario. Por ejemplo:
Empleos de la A a la Z – Muchos títulos y destrezas universitarias se adaptan a la perfección a la carrera de los seguros. Un título de graduado en finanzas, contabilidad, mercadotecnia, recursos humanos, derecho, informática– incluso en silvicultura –puede implicar un empleo interesante en el campo de los seguros. Además, la experiencia de trabajo y las destrezas especiales – como las de un chef, un piloto o un amante de los animales – pueden ser de gran utilidad en el respaldo a los negocios de los clientes, como restaurantes, aeropuertos y tiendas de venta de mascotas.
Abundantes especialidades – Una vez obtenida la experiencia en el campo de los seguros, no habrá limitación alguna en desempeñar las profesiones que ofrece la industria. Valinotti agrega que muchos empleados de seguros ganan experiencia práctica y luego pasan a otros cargos como liquidador, investigador de campo, comercializador de productos, gerente de proyectos y asesor de control de pérdidas. “Existen cientos de especialidades y responsabilidades en el campo de los seguros” explica el experto. “La mayoría de las personas no tiene la menor idea de los empleos disponibles que ofrecemos”.
Pasantías – Incluso si no cree que pueda incorporarse a una profesión en el sector de las aseguradoras, una pasantía relacionada con el mismo es una forma idónea de probar la industria, usar sus destrezas y tener contacto con diferentes experiencias de negocios. El conocimiento que obtendrá podría propiciar el desempeño de una profesión que de otra forma no habría considerado.
Además, la industria de los seguros, conjuntamente con su amplia gama de posibles profesiones, ofrece algo que muchas otras no pueden: la estabilidad. “La necesidad de tener un seguro no va a desaparecer. Todos tenemos vidas y propiedades que debemos proteger. Una profesión en el campo de los seguros nos permite ayudar a los demás cuando más lo necesitan”, concluye Valinotti.