Las innovaciones en los dispositivos médicos, desde prótesis personalizadas a cirugía mínimamente invasiva, están dando como resultado progresos sorprendentes. Ejemplo de ello es el corazón artificial que usa tubos plásticos en vez de válvulas cardiacas, para el paso de la sangre dentro y fuera de dos ventrículos plásticos. Este corazón plástico, implantado a más de mil pacientes, ha alargado vidas por un total que supera los 270 años. En estos momentos, los reguladores estadounidenses están analizando una fuente móvil de energía acompañante que se lleva en una mochila, para que los pacientes aptos puedan salir del hospital y vivir en sus domicilios.
Aunque es un notable paso de avance, sólo se trata de uno de los proyectos en proceso que a menudo se hacen posibles por la utilización de plásticos especiales. A continuación, otros dispositivos de próxima introducción:
Parches de vacunación: los investigadores están trabajando en un parche plástico para la piel que podría sustituir a muchas inyecciones dolorosas. El parche contiene “microagujas” plásticas que se disuelven en la piel, administrando sin dolor vacunas contra una amplia gama de enfermedades como la influenza. Los pacientes podrán incluso vacunarse ellos mismos algún día.
Stent cardiaco reabsorbible: un stent cardiaco plástico que puede abrir una arteria obstruida para reiniciar el flujo sanguíneo al corazón, y luego disolverse lentamente en el organismo. Este plástico reabsorbible puede eliminar la necesidad de otro procedimiento invasivo para retirar el stent, así como reducir la posibilidad de formación de coágulos y cicatrices.
Impresión de partes del cuerpo en tres dimensiones: los investigadores están usando una técnica de fabricación por ensamblaje estratificado – conocido como “impresión tridimensional” – para crear dispositivos médicos e implantes usando plásticos. Ejemplo de ello es cuando se combina un tipo de plástico con células vivientes, para crear un material que se usa en la fabricación de implantes impresos tridimensionalmente para reemplazar el cartílago de la oreja humana. Según los investigadores, la combinación de materiales propicia que el organismo tenga mayor propensión a responder favorablemente al implante.
Dispositivos médicos de policarbonato: el policarbonato, un plástico transparente de extrema dureza, se está usando para fabricar herramientas quirúrgicas como cánulas (pequeños tubos que se introducen en el cuerpo) que facilitan la cirugía artroscópica. Como el policarbonato es transparente, los cirujanos pueden tener una mejor visibilidad de las suturas y nudos quirúrgicos durante la operación.
Plásticos resistentes a las bacterias: varios plásticos descubiertos recientemente podrían contribuir a menos infecciones. Estos plásticos cuentan con superficies “antiadherentes” que no atraen bacterias, lo cual evitará la contaminación provocada por las “biopelículas” cargadas de bacterias. Los plásticos se pueden usar en la fabricación de catéteres o equipos médicos para prevenir enfermedades evitables.
Prótesis con autocuración: Los investigadores están creando una nueva “piel” plástica que detecta cuando está dañada, y responde curándose a sí misma. La piel plástica imita la flexibilidad y sensibilidad de su contraparte humana, y adopta conductividad eléctrica cuando se le añade una porción de níquel. La piel plástica puede restaurar sus propiedades mecánicas y eléctricas después de ser cortada, un ciclo que se puede repetir una y otra vez. Los científicos esperan que, entre otras aplicaciones, el plástico con autocuración se podrá usar en la fabricación de prótesis de miembros de aspecto natural que se curen a sí mismos después de una lesión, de la misma forma que lo hace la piel humana.
Espuma plástica para salvar vidas: se está explorando un uso novedoso de la espuma plástica de poliuretano, para estabilizar a pacientes de trauma con lesiones internas producidas en el campo de batalla. El gobierno de los Estados Unidos está estudiando el uso de espuma de poliuretano para llenar las cavidades afectadas del cuerpo, luego de una herida interna grave infligida en combate. La espuma se expande dentro del organismo, adoptando la forma del tejido afectado y reduciendo la pérdida de sangre, y posteriormente el cirujano la retirará en una sola pieza. De acuerdo a pruebas recientes, los investigadores estiman que esta tecnología podría incrementar de forma significativa los índices de supervivencia.
Impresión de orejas humanas, administración de vacunas indoloras, piel artificial con autocuración, dispositivos médicos transparentes: si bien esas innovaciones pudieran parecernos futuristas, algunas ya existen, mientras que otras tienen el potencial de perfeccionar la atención médica de todos los habitantes del planeta.